¿Cómo funcionan las apps espías de WhatsApp?

Si te preocupa la posibilidad de que tu WhatsApp esté siendo objeto de vigilancia, te brindaremos información sobre cómo resguardarte y te explicaremos el funcionamiento de las aplicaciones diseñadas para espiar WhatsApp, para que tengas claridad sobre la situación. En caso de que estés considerando espiar el WhatsApp de otra persona, destacaremos las consecuencias legales de llevar a cabo esta acción, con el objetivo de disuadirte.

Entonces, ¿cómo es posible que existan numerosas aplicaciones y servicios que prometen la facilidad de espiar el WhatsApp de alguien? La respuesta es bastante simple: la gran mayoría de ellas son básicamente una estafa; aplicaciones que no cumplen con sus promesas y simplemente simulan realizar ciertas funciones.

¿Cómo funcionan las apps espías de WhatsApp?

No todas las aplicaciones espía de WhatsApp comparten las mismas características. Existen diversas categorías de aplicaciones que prometen la capacidad de espiar WhatsApp de una forma u otra, y algunas de ellas logran sus objetivos de manera más o menos efectiva. Aquí se presentan los tipos principales de estas aplicaciones:

IMPORTANTE: Las aplicaciones que prometen espiar las conversaciones de WhatsApp de cualquier número de teléfono, estas son fraudulentas. Como mencionábamos anteriormente, las conversaciones están cifradas desde 2016, lo que hace imposible que alguien las descifre, y mucho menos a distancia.

Registro de actividad de conexión a WhatsApp

Existen aplicaciones que no revelan el contenido de los mensajes ni con quién está interactuando alguien, sino que registran cuándo alguien se conecta y desconecta de WhatsApp.

• Anotan los momentos en que alguien está "en línea" o fuera de línea en WhatsApp. La mayoría de las aplicaciones de este tipo, disponibles en Google Play (ya que la tienda de Apple no las permite), se encuentran en esta categoría.
• WhatsApp ha implementado cambios recientes, y ahora resulta imposible para alguien sin una comunicación previa saber si otra persona está en línea o la hora de su última conexión.
• Por lo tanto, este tipo de aplicaciones parece tener sus días contados, a menos que encuentren una nueva forma de recopilar la información.

Algunas de estas aplicaciones iban más allá, permitiéndote comparar las horas en las que varias personas estuvieron en línea simultáneamente. Si los patrones de conexión coincidían, se podía utilizar la información para inferir que ambas personas estuvieron conversando, aunque, evidentemente, sin contar con ninguna prueba concreta.

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¿Son seguras éstas Apps que se usan para espiar?

Navegando por la web, no resulta complicado encontrar aplicaciones espías, aunque en la mayoría de los casos, las defensas antivirus del navegador o del dispositivo móvil impedirán su descarga. Y con razón: si bien estas aplicaciones no pueden espiar las conversaciones de otras personas en WhatsApp, sí pueden poner en riesgo tu privacidad una vez instaladas. Pueden robar información de tu dispositivo, suscribirte a servicios SMS Premium, o incluso cifrar tus datos exigiendo un rescate (ransomware). Ejemplos de estas aplicaciones, como hackingtor, solían funcionar antes de 2016, cuando las conversaciones de WhatsApp no estaban cifradas, y en casos muy específicos.

Sin embargo, en la actualidad, son completamente inútiles. Además, el hecho de que requieran acceso de administrador (o root, en el caso de Android) las convierte en una amenaza para la seguridad de tu dispositivo, representando un riesgo significativo sin ninguna posibilidad real de obtener beneficios a cambio, excepto quizás que WhatsApp elimine tu cuenta por violar sus términos de servicio.

Apps de control remoto

No se pueden utilizar de forma anónima, ya que es necesario instalar una aplicación en el dispositivo móvil de la persona objetivo. Algunas de estas aplicaciones son muy conocidas y utilizadas, como TeamViewer, aunque no con el propósito de espiar a otros, sino para controlar remotamente tus propios dispositivos o brindar asistencia técnica a otras personas de manera remota. A través de estas aplicaciones, puedes visualizar lo mismo que la otra persona después de establecer una conexión con su dispositivo, aunque la realidad no es tan sencilla ni práctica como pueda parecer.

La complejidad radica no solo en que el atacante necesita instalar una aplicación en el dispositivo de la persona objetivo, sino también en que la mayoría de las aplicaciones de este tipo muestran un aviso evidente cuando el dispositivo está siendo controlado de forma remota. En algunos casos, incluso el propio sistema operativo emite una notificación informando que se está transmitiendo todo lo que aparece en la pantalla.

Sesiones de WhatsApp Web

Desde un punto de vista técnico, no se trata de una aplicación, sino de un sitio web y, además, es oficial, aunque constituye uno de los pocos métodos verdaderos para "espiar" el WhatsApp de otra persona. Se requiere acceso físico al dispositivo móvil para iniciar una nueva sesión de WhatsApp Web.

El riesgo más considerable es el espionaje a través de WhatsApp Web, aunque un atacante necesitará tener acceso a tu dispositivo móvil durante unos minutos. De la misma manera en que tú puedes conectarte a WhatsApp Web para seguir tus conversaciones en una computadora o tableta, otra persona puede aprovechar un descuido para tomar tu móvil e iniciar sesión con tu WhatsApp Web en otro dispositivo de su propiedad, ya sea un móvil, tableta o computadora. WhatsApp Web no exige que ambos dispositivos estén conectados a la misma red Wi-Fi para funcionar, lo que implica que, desde un punto de vista técnico, esa otra persona puede acceder a todas tus conversaciones con relativa facilidad.

¿Cómo proteger mi Whatsapp frente a espías?

Considerando el funcionamiento de las aplicaciones y métodos diseñados para espiar, o al menos intentarlo, en el WhatsApp de una persona, te presentamos una serie de consejos que te serán útiles para evitar que accedan a tu WhatsApp o, al menos, dificultarlo significativamente. Aquí tienes algunas recomendaciones:

1. Bloquea tu dispositivo: Los métodos efectivos para espiar WhatsApp suelen requerir acceso físico al dispositivo de la otra persona. Protege tu móvil con contraseña, PIN o, preferiblemente, huella dactilar, para evitar posibles intentos de espionaje. Además, mantén tu móvil a la vista cuando esté desbloqueado, especialmente si has configurado que no se bloquee en casa u otras situaciones similares.
2. Protege WhatsApp con biometría: Desde 2019, WhatsApp ofrece la opción de proteger tus chats con huella dactilar o Face ID, lo cual evita que alguien pueda acceder a tus conversaciones fácilmente al abrir la aplicación. También previene la creación de nuevas sesiones de WhatsApp Web sin tu autorización.
3. Revisa las sesiones de WhatsApp Web: Es recomendable revisar regularmente las sesiones abiertas en WhatsApp Web para detectar posibles accesos no autorizados. Cierra todas las sesiones si aparecen dispositivos desconocidos o si recibes alertas de sesiones abiertas cuando no estás utilizando tu móvil.
4. Ajusta tu privacidad en WhatsApp: Aunque no puedes ocultar si estás en línea, puedes controlar otros aspectos de tu privacidad, como tu foto de perfil, la hora de última conexión, el estado o las confirmaciones de lectura. Ajusta estas configuraciones según tus preferencias.
5. Activa el antivirus del móvil: Los móviles Android vienen con un antivirus integrado en Google Play, conocido como Google Play Protect. Este antivirus puede detectar posibles aplicaciones espías de control remoto y alertarte sobre su presencia.
6. No compartas tu número de teléfono públicamente: Para evitar que alguien utilice aplicaciones para rastrear tu actividad en WhatsApp, es recomendable no divulgar públicamente tu número de teléfono. WhatsApp sigue vinculado estrechamente a los números de teléfono, por lo que limitar la divulgación de tu número ayuda a proteger tu privacidad.

¿Qué pasa si intento espiar el WhatsApp de una persona?

Husmear en las conversaciones ajenas puede parecer una travesura inofensiva, una broma según lo describen algunas aplicaciones similares en las tiendas de aplicaciones, pero está lejos de serlo.

Este delito se castiga incluso con penas más severas, llegando a los cinco años de prisión cuando se difunden las conversaciones, especialmente si los datos difundidos afectan a aspectos personales como ideología, religión, creencias, salud, origen racial o vida sexual, y cuando la víctima es menor de edad o una persona con discapacidad.

En situaciones más agravantes, las penas pueden alcanzar los siete años de prisión, especialmente cuando los actos se realizan con fines lucrativos y se incluyen datos personales sensibles.